Inicia un nuevo año, y con ello nuevos retos para las empresas en materia medioambiental. La Cumbre del Clima que se celebró en el 2015 en París, dejó mucho para reflexionar y actuar para proteger el medio ambiente.
Por ello, los principales retos para el 2016 que las empresas y la sociedad deben de cumplir se pueden resumir en los siguientes cinco aspectos:
1. Cambio Climático
Los expertos alertan a la sociedad y a las empresas a realizar medidas preventivas y acciones que contribuyan a reparar el impacto medioambiental, para que las futuras generaciones puedan vivir y disfrutar un mundo libre de combustibles, y elegir productos que provengan de fuentes renovables.
2. Contaminación y Escasez de Agua
Los niveles de contaminación provocados por las empresas y la sociedad están afectando a los ríos y mares, provocando el envenenamiento progresivo del agua potable que es esencial para nuestra supervivencia, causando, además, la extinción de especies que viven en ésta hábitat. La escasez de agua ya es una realidad, un ejemplo es la situación crítica en Brasil, en donde por el mismo cambio climático, el sistema Cantareira, principal fuente de agua de la región de Sao Paulo atravesó la peor sequía de su historia en el 2014.
3. Biodiversidad
La destrucción de los hábitats y la caza furtiva están ocasionando la desaparición de muchas especies, provocando un efecto negativo en el ecosistema, alterando irreversiblemente la cadena alimenticia, por lo que es importante la participación de las empresas para crear conciencia sobre la importancia de reparar, respetar y cuidar la vida de todas nuestras especies en todos los ecosistemas.
4. Deforestación
La tala inmoderada y criminal de árboles, es un problema que afecta el aire que respiramos, debido a que muchas empresas no replantan los árboles que extraen, además de matar a muchas especies. Otro gran problema son los incendios forestales que se ocasionan por la basura que irresponsablemente se tira en los bosques.
5. Contaminación
Las emisiones CO2 de las industrias y las plagas provocadas por químicos utilizados en fertilizantes o insecticidas no controlados, afectan no sólo la biodiversidad y el medio ambiente, sino también provocan graves daños a la salud, sin dejar de mencionar los productos transgénicos, que perjudican el medio ambiente de nuestras especies desequilibrando las bondades que nos da la naturaleza.
Es por ésto que debemos ser conscientes de que cada una de nuestras acciones, buenas o malas, repercutirá en nuestra vida, y en la de nuestras futuras generaciones.
